Es por todos conocido, que la Dirección de la planta de Burgos jamás ha tenido la más mínima voluntad de implantar la jornada intensiva y mejorar con ella la conciliación familiar de los trabajador@s encuadrados en el calendario de lunes a viernes. Año tras año, la Dirección ha mantenido esta negativa, eso sí, sin sustentarla en ningún argumento mínimamente sólido.

La comparativa con otras plantas del Grupo, en las que lleva implantada desde hace años con buenos resultados, nunca les ha valido, con decir que tenemos una realidad distinta… asunto concluido.

Las múltiples ventajas, entre ellas el aumento de la productividad, que ha conllevado en multitud de empresas, tampoco les ha valido. Ya sabéis… tenemos una realidad distinta.

Ahora bien, lo de este año ha sobrepasado todo lo imaginable. El viernes, la Dirección nos confirmó que el sistema de guardias en el que estaban trabajando, para poder implantarla sin dejar de dar cobertura al turno de tarde dos horas, ya no es viable debido a la falta de compromiso de los afectad@s. Llegando a asimilar la misma, con el hecho de que en estos momentos haya un número importante de trabajador@s de este colectivo de baja, básicamente porque les da la gana, no porque sufran algún tipo de patología, lo que aseguran está provocando que no se alcance el ticket.

Atreverse a hablar de bajas fingidas con carácter general sin analizar cada caso particular y utilizarlo para no implantar la jornada intensiva, es un argumento que, como dijimos en la reunión, SITB considera absolutamente inaceptable y por el que hay quien debiera disculparse y rectificar.

Lo cierto es que cualquiera que tenga unos mínimos conocimientos sobre cómo funciona esta planta, puede enumerar un buen número de motivos por los que realmente no se está alcanzando el ticket:

1.- Falta evidente de plantilla. Y los que entran para cubrir las ausencias del verano lo hacen cada vez más tarde, con lo que supone en las formaciones que reciben y en cuándo empiezan a producir con normalidad.

2.- Deficiente mantenimiento de las máquinas. Porque lo único importante es la producción inmediata, evitando planificar paradas.

3.- Calor. Que en esta época del año provoca que los materiales vengan en peor estado y que las máquinas se disparen continuamente.

Nada se hace desde la Dirección para solucionar estos y otros problemas que sí impiden alcanzar el ticket, porque lo cierto es que resulta mucho más sencillo echar la culpa de todo a los trabajador@s.

Trabajador@s de un colectivo que llevan años demostrando su total compromiso, haciendo todo lo que se les solicita, en la mayor parte de las ocasiones con escasez de medios, teniendo muy poco en cuenta su opinión y además, soportando el incumplimiento sistemático de las políticas de desconexión digital y registro horario de Bridgestone.

Y además nos surge una pregunta, si el único argumento es no estar alcanzando el ticket, ¿por qué se le deniega también al personal no vinculado directamente con la producción como son IT, RRHH, Ingeniería…?

Para SITB la situación es evidente y la solución está clara, nuestra Dirección no entiende que el diálogo y la negociación son las herramientas para alcanzar acuerdos y además, cuando finalmente los consigue con otras distintas, ni tan siquiera los cumple. Lo único que maneja a la perfección desde hace tiempo es la imposición.

Ante todo esto, la única opción que nos deja la Dirección a los trabajador@s para poder conseguir nuestras legítimas reivindicaciones es la lucha, tal y como ocurrió el año pasado, cuando tras la interposición de un conflicto colectivo por parte de SITB, en este caso junto a UGT y CCOO, conseguimos entre otras cosas que se implantase la jornada intensiva desde el 17 de junio hasta el 6 de septiembre. Por el contrario este año gracias a la “negociación”… nada de nada.