En la reunión del Comité Intercentros celebrada esta mañana para proseguir con la negociación del XXIV Convenio Colectivo, según manifiesta la empresa, nos hace una propuesta asumible por los trabajadores y como ultimátum para llegar a un acuerdo en un breve espacio de tiempo.
Para la empresa, esta plataforma asumible es la siguiente:
VIGENCIA: 2013 a 2018 (2012 queda congelado)
JORNADA: Mantendría la jornada actual, vinculada a una aprobación de la flexibilidad colectiva de -25 a +15 días (antes -30 y +21). Por encima, los primeros 7 días (antes 12) solo pagaría los pluses, ni salario ni Condiciones Modificativas y el resto pagaría además el 50% de estos conceptos. Hacia abajo, los primeros 13 días (antes 15) 100% descuento íntegro. El resto, abonaría el 50% del Salario de Calificación y Condiciones Modificativas (antes el 40%). Si se opta por descansar, sería día por día. Desaparece la flexibilidad individual.
INCREMENTO SALARIAL: Sin subida hasta el 2018 en caso de aceptar una rebaja en los pluses del 20% (antes el 35%). En caso de aceptar una rebaja en los pluses del 30% (antes el 50%), habría una subida salarial del 1% de 2016 a 2018.
HORAS EXTRAS: La empresa no quiere pagar los pluses y aplicar un recargo del 75%.
Todos los demás conceptos (antigüedad, plan de pensiones, modificación del sistema de primas), quedan como estaban en su plataforma anterior.
En esta nueva propuesta de la empresa se ven atisbos de mejora, aunque sigue sin cubrir nuestras expectativas
Consideramos que también hay conceptos importantes que negociar como son las condiciones de la flexibilidad, algo que ya se pidió en la reunión anterior y aún no tenemos respuesta por parte de la empresa. También hemos vuelto a exponer nuestra inquietud a que la flexibilidad pueda ser utilizada para una reducción en las plantillas, y nos hemos reiterado en nuestra reivindicación de GARANTÍA EN LAS PLANTILLAS.
Otro concepto importante a tratar y que la empresa aún no se ha dignado a negociar (solamente quiere congelarla), es la ANTIGÜEDAD. En esta reunión, hemos lanzado una propuesta sobre este tema, que no es otra que este sea un concepto que revierta en todos los trabajadores (incluidos los que hasta ahora no la cobran). La formula es bien sencilla: Fijemos una masa salarial y destinémosla al concepto de antigüedad y repartámosla entre todos los trabajadores. Así, al jubilarse trabajadores, esa antigüedad entraría a repartirse entre todos.
De este modo por una parte, la empresa cubriría sus expectativas de que el gasto no se le dispare sin negociar, y por otra parte, podríamos cobrarla todos los trabajadores y no perderíamos este derecho.